miércoles, 20 de junio de 2012

La sequedad de boca y su solución


La sequedad de boca se puede notar cuando tienes la boca pastosa, sientes ardor o tienes alteraciones gustativas. La boca seca se produce en determinadas situaciones ante la falta de saliva. Veamos en qué situaciones se produce, qué consecuencias tiene y unos consejos para el cuidado de la sequedad bucal.

Situaciones que originan sequedad de boca

Las causas más comunes de la sequedad bucal son:
1. Hablar en público: en estas situaciones aumenta la necesidad de salivación para ayudar a vocalizar las palabras; si se está mucho rato, es necesario ingerir líquidos para contrarrestar la boca seca.

2. El estrés y la depresión: afectan al sistema nervioso central y a la secreción de glándulas como las salivales.

3. Una dieta desequilibrada: con exceso de hidratos de carbono y déficit de fruta y verdura puede provocar una alteración de la producción de saliva por falta de componentes esenciales.

4. El tabaco y el alcohol: ambos tienen componentes que alteran la transmisión de los impulsos nerviosos, pudiendo alterar el trabajo de las glándulas salivales y provocando la sequedad bucal.

5. Medicamentos: como los antihistamínicos, los antihipertensivos, etc., tienen como efectos colaterales intrínsecos la disminución de saliva y la sequedad de boca.

6. Diabetes y otras enfermedades sistémicas: afectan a todo el organismo desequilibrando también el funcionamiento de glándulas y entre ellas las glándulas salivales.

7. Tratamiento del cáncer en cabeza y cuello: la radiación es un tratamiento muy común en oncología y uno de sus efectos colaterales es la atrofia de las glándulas mucosas, incluidas las salivales, en las que se produce una inflamación crónica acabado el tratamiento y el descenso en la producción de saliva.

8. El envejecimiento: la edad avanzada produce que las glándulas salivales se vean afectadas por las atrofias de las células que las componen por su envejecimiento.

Consecuencias más comunes de la sequedad bucal

Por nombrarte algunas, las más comunes son las siguientes:

- Incremento del número de caries.

- En las encías, en ocasiones puede aparecer gingivitis.

- Dificultad para hablar.

- Fisuras de labios y lengua.

- Trastornos alimentarios, debidos a problemas en la deglución.

- Sensación de ardor en la boca.

- Boca pastosa al despertar.

- Halitosis o mal aliento.

- Inflamación de las mucosas.

- Con frecuencia relacionada con faringitis, laringitis y el estreñimiento.

- Paladar seco y eritematoso.


Consejos para eliminar la sequedad bucal

El primero y el mejor de todos los que te puedo dar es estar bien hidratado. Toma abundantes líquidos a diario, el mínimo en un adulto, debería ser de 1,5 a 2 litros/día, pero si estás en esta situación, es decir con sequedad bucal, aun deberías ingerir más líquidos.

Con la hidratación no solo lo agradecerá tu boca, también tu piel, tus riñones y el resto del organismo.

Otros consejos de mayor o menor utilidad son:

- Lleva a cabo una rigurosa higiene bucal diaria.
- Evita el consumo de alcohol, ya que alcohol de por sí reseca.
- Humedécete los labios con cierta frecuencia.
- Evita productos con azúcares refinados para prevenir la caries dental

- Evita alimentos secos, pegajosos, picantes, ácidos, salados, con muchas especias o a temperaturas extremas.
- Evita productos irritantes o excitantes (café, alcohol, refrescos con cafeína)
- Consume alimentos favorables, como quesos curados, que aumentan la salivación y favorecen la remineralización dental por su contenido en calcio y fosfato, o vegetales y frutas, que contienen lecitinas que reducen la colonización de bacterias cariogénicas.

Por último y no menos importante es adecuado que si el problema es serio o persiste, consultes con un especialista, bien con tu médico de familia o bien con tu dentista. Ellos te darán las indicaciones más oportunas al respecto.

Fuente: http://davidcortejoso.visibli.com/share/DSM8xT

No hay comentarios:

Publicar un comentario